domingo, 12 de enero de 2020

Asturias, Picos de Europa y alrededores.

El día 23 de julio martes, teníamos pensado madrugar para subir a Picos de Europa, conocer Covadonga y Cangas de Onís.

Picos de Europa.
(Fotografía de Silvia)

Tras pasar el control de acceso, veíamos cómo el paisaje cambiaba y la subida sería inminente.
Por dicha subida ya bien temprano sobre las 7:54 de la mañana vimos nuestras primeras ardillas salvajes, las pocas que quedan, fue en esta carretera donde vimos más de 2 ejemplares en la bajada, dichos ejemplares estaban muertos por atropello.


Ardilla roja.
 (Sciurus vulgaris)

Ardilla roja.
 (Sciurus vulgaris)

Yo mismo observe cómo la ardilla bajó de un arbusto frutal y cruzó la carretera y ya pude fotografiarla. 
En esas horas entran los últimos coches por el acceso y también congujan con la actividad de las ardillas.


Ardilla roja.
 (Sciurus vulgaris)

Ardilla roja.
 (Sciurus vulgaris)

Por la Calzada frutales de todo tipo aparecían y al dejar abajo la zona arbolada empiezan las praderas verdes y se nota ya el cambio hacía la subida a picos sin ningún tipo de arbolada, solo plantas de pequeño porte.


Cardo azul.
(Eryngium bourgatii)

Cardo azul.
(Eryngium bourgatii)

Ya en la última casa de la subida una de mis mejores observación, un busardo ratonero, eso sí, no enseñes la cámara o se irá.
 Entre la banda musical de Picos sus bandos de cornejas y chovas piquirrojas ponían ese tono musical.


Chova piquirroja.
(Pyrrhocorax  Pyrrhocorax)

Ya arriba en el aparcamiento, veía muchas aves en el cielo y grandes, al echarles una foto y ampliar observé un bando de buitre y mi ilusión por el quebrantahuesos se difumina, ese día hacía muchísimo viento, los propios lugareños ni se lo creían, te arrastraba estando de pie, sentado te levantaba y ya veía que no sería el mejor día para observarlos.


Vacas descansando.

Mamá y su novillo.

Andando desde el aparcamiento hasta el lago enol por un arroyo, observamos los primeros pardillos, jilgueros, pinzones y gorriones.


Pardillo común.
(Carduelis cannabina)

Pinzón vulgar.
(Fringilla coelebs)

Pinzón vulgar.
(Fringilla coelebs)

Pardillo común.
(Carduelis cannabina)

Pinzón vulgar.
(Fringilla coelebs)

Bisbita alpino.
(Anthus spinoletta)

Ya haciendo una espera en una roca en el lago de Enol solo veía buitres y más buitres pero ni rastro del más  buscado.


Lago de Enol.
(Fotografía de Silvia)

Allí fue donde un gran buitre negro me pegó un gran susto.
 Viendo que el viento no se iba y encima empezó a empeorar ya tenía decidido no verla.
En picos pudimos ver cabras y terneros eran súper gracioso y cómo se adaptan al hábitat.
Vacas y novillos que pactan a sus anchas por las praderas, la raza por excelencia es la asturiana de la montaña.
Raza que sus hembras llegan a los 400 o 500 kilos de peso y los machos de 600 a 700 kilos, principalmente sus colores son el cremoso hasta el rojo encendido, son autóctonos de Asturias.
Al igual que la cabra autóctona de la zona alpina de Asturias es la cabra bermeya.

Novillo, color cremoso.

Cabra bermeya.

Cabra bermeya.

Después probamos Suerte en el Mirador de la Reina, aunque esa suerte no apareció.
Unos mastines y sus cachorretes pusieron ese tono melancólico en el mirador.
En la bajada seguían las chovas piquirrojas peleándose por la comida.


Chova piquirroja.
(Pyrrhocorax  Pyrrhocorax)

Llegamos a Covadonga visitamos la iglesia, la famosa virgen (la santina) y a un lado se encuentra la gran estatua de Pelayo, más tarde concluimos con un paseo por cangas de Onís.


Santuario de Covadonga.
(Fotografía de Silvia)

Santuario de Covadonga.
(Fotografía de Silvia)



Decoración de una casa en cangas de Onís.


Gracias por leerme.

viernes, 10 de enero de 2020

Asturias, paraíso natural.

El día 22 de Julio, esa mañana llegamos a Asturias después de 10h y media de coche.

Mirador Embalse barrios de luna.



Costa de Gijón.
(Fotografía de Silvia)

Cruzamos España en busca de lo inaudito, lo insólito.
Ese mismo lunes tras almorzar nos guiaron por Gijón nuestro destino hotelero por unos días.
En esa ciudad saque mis primeras observaciones.

Urraca.
(Fotografía de Silvia)

En la escultura Elogio del Horizonte junto a un acantilado había un halcón peregrino, tras levantar la cámara se fue volando, también influye el buzo que limpiaba pescado en el acantilado.


Elogio del horizonte.
(Fotografía de Silvia)

Elogio del horizonte.
(Fotografía de Silvia)


Elogio del horizonte.
(Fotografía de Silvia)

Buzo espanta pájaro.
(Fotografía de Silvia)

Limpiando el pescado.
(Fotografía de Silvia)

Ya se notaba que en éstas latitudes las aves serían más reacias a las cercanías.
Esa cercanía nos la mostró el colirrojo tizón.

Macho de colirrojo tizón.

Hembra de colirrojo tizón.

Un poco más adelante siempre por el acantilado en una zona rocosa vimos a nuestro primer cormorán moñudo.

Cormorán moñudo.
(Phalacrocorax aristotelis)

Cormorán moñudo.
(Fotografía de Silvia)

Los bandos de cornejas no dejaban de pasar.
Ya en el centro de Gijón puede observar las primeras Gaviotas patiamarillas de todas las edades.

Gaviota patiamarilla.
(Larus michahellis)

Gaviota patiamarilla.
(Larus michahellis)


Gaviota patiamarilla.
(Larus michahellis)


Gaviota patiamarilla.
(Larus michahellis)


Si note la poca presencia de gorriones comunes.

Gorrion común.
(Fotografía de Silvia)

Acabamos echando una tarde con su agradable paseo para conocer más de Gijón.

Árbol de la sidra.
(Fotografía de Silvia)


Paseo del puerto.
(Fotografía de Silvia)


Algo que si se notaba es la concienciación por éstas zonas y es que el plástico es la gran batalla de éste nuevo año.

Cartel informativo.
(Fotografía de Silvia)

Y durante un agradable paseo y viendo aves urbanas por Gijón, me despido hasta la próxima entrada.

Muchas gracias por leerme.

miércoles, 8 de enero de 2020

Guiando por Sevilla III, el Lince ibérico.

El día 28 de junio quedé con Alejandro para llevarlo a una zona lincera, en la cual ya llevaba él varios atardeceres echados.
Y allí dando vueltas por la dehesa pasamos un buen rato antes de despedirme de él.

Hábitat del Lince ibérico.


Entre huellas de lince, había huellas de perdiz y varias sendas más, las huellas ese mundo en el que te inunda en lo más prehistórico de la vida, dónde otros aspectos más primitivos salen de nosotros y ese es el Rastreo.

Huella casi fresca del Lince ibérico. 

Senda del Lince ibérico.

Huella fresca de un cánido, lo más seguro de algún perro doméstico.

Nos despedimos de Alejandro y no por mucho tiempo porque tenemos que tenerlo más por el sur, dado que el gallego de Ourense tiene mucho que enseñarnos de las fotografías, gracias al padre de Alejandro y a él por hacer de este pequeño mundo de la ornitología que sea valorado.



Cuándo cae la noche y el silencio a inundado la dehesa.
Observatorio del Lince ibérico.

Es la hora perfecta para un fotógrafo como Alejandro y de ahy que me deja alucinado con sus instantáneas.

                 
Fotografía de Alejandro.

Composición de Alejandro y Andrés(yo) de una fotografía nocturna y otra tirada del eclipse.

Red social se Alejandro: https://www.instagram.com/alejandro_camba/?hl=es

Gracias por leerme.